Modelo, actriz, fotógrafa, activista de la buena salud, abanderada de la lucha contra el cáncer, Kris Carr se ha convertido en una líder por derecho propio, brindando esperanza y ánimos a sus fieles seguidores, que ya se
cuentan por millones.
Es joven, bella y exitosa. Su rostro resplandece y siempre tiene esa sonrisa alegre que le ilumina el rostro. Al verla, nadie podría imaginarse que esta hermosa mujer vive con cáncer desde hace diez años.
Era un frío día de invierno en la ciudad de Nueva York, 14 de febrero de 2003, para ser más precisos. Ese día marcaría el inicio de una vida diferente para esta esplendorosa rubia, quien luego de pasar por varios chequeos médicos debido a un fuerte y debilitante dolor abdominal, recibió la terrible noticia que en un inicio no comprendió: tanto el hígado como los pulmones estaban llenos de lesiones. ¿Pero de qué le estaba hablando este doctor? ¿Cómo pudo perforarse las vísceras sin darse cuenta? Simplemente, en su mente, eso no era posible.
El médico fue lúgubre cuando le explicó, sin intenciones de dorar la píldora, que cada lesión era un tumor canceroso del peor tipo aunque de crecimiento lento. Había tantas de ellas que en vez de un hígado (y unos pulmones) le parecía estar viendo las fotos de un queso Gruyere –sí, esos enormes quesos llenos de huecos de todos tamaños-.
Vivir con cáncer
Luego del shock inicial, de las lágrimas y del terror que compartió con su familia, Kris se dedicó a investigar y a estudiar. Entrevistaba oncólogos como si buscase al mejor candidato para un puesto de trabajo, como si se tratara de un casting, descartando en el camino sugerencias tan absurdas como un triple trasplante de órganos. Ella misma se declara como “graduada de Google” por todo el tiempo que dedicó a aprender sobre su enfermedad. Pero una cosa tenía bien clara: iba a pelear por su vida y lo haría con uñas, dientes y grandes dosis de buen humor.
La importancia de la dieta
Después de iniciarse en la meditación, el yoga, los ejercicios, y todo tipo de métodos de desintoxicación, Kris enfocó toda su atención en su dieta. No más café ni azúcar, pues esta última es el principal alimento de las células cancerosas, así que la desterró para siempre de su vida. No más martinis ni cigarrillos. Nada de carnes ni de comida procesada. De vegetariana pasó a vegana y trata de que la mayor parte de sus comidas sean crudas. Comenzó a tomar al menos 1 litro diario de jugos verdes (o batidos) y, aunque no lo crean, su piel resplandece y ella, rubísima y delgadísima, está llena de energía y de vitalidad.
Los libros
Hace un par de años estuve en la presentación de uno de sus libros y la tuve como a metro y medio de distancia. Kris es tan enérgica que nadie pensaría que sufre de algo, pero como ella misma nos contó, es una enferma crónica de cáncer, y nadie sabe si este va a despertar de su letargo y volverá a atacar en cualquier momento, un tema especialmente delicado ahora que contempla la posibilidad de ser madre. Mientras tanto ella continúa en su cruzada para ayudar y dar esperanzas a todo aquel que quiera oírla, ya sea en las múltiples charlas que dicta, siguiendo su página web, www.kriscarr.com o leyendo sus libros que son best-sellers en los Estados Unidos, con muchas semanas de vigencia en la exigente lista del New York Times. Luego de un tiempo en el que pensó que estaba condenada a no volver a salir con un chico, o hacer una vida normal, la inspiración por hacer algo bueno para ella y para toda la gente en su misma situación la llevó a escribir Crazy Sexy Cancer, un libro donde documenta todo lo investigado sobre esta enfermedad y las terapias alternativas con las que ella se
sentía bien.
Luego le siguió Crazy Sexy Cancer Tips, un tratado de consejos de todo tipo por y para víctimas del cáncer de cualquier edad, principalmente de adultos jóvenes como ella. Modelos, actrices, jóvenes profesionales cuentan sus inspiradoras historias y cómo siguen luchando por salir adelante a pesar del miedo y de todos los traumas físicos y emocionales que una enfermedad como esta puede dejar.
¿Sabías que si te arreglas un poco durante las etapas duras de la quimioterapia, o simplemente cuando te sientes peor que nunca, al verte mejor en el espejo te levantarás elánimo? Kris es una gran consejera y promueve la belleza durante esta etapa de la vida. Si el paciente está sin cabello, hay quienes encuentran hermosura en ello y lucen sus cabezas con orgullo.
Luego le siguió Crazy Sexy Diet, que contiene el Manifiesto, un programa de 21 días para desintoxicar el cuerpo tanto física como espiritualmente, pues para la autora, los dos van de la mano. Algunos de los pasos son los siguientes: Exfoliarse diariamente porque la piel es el órgano más extenso del cuerpo y por ahí eliminamos gran cantidad de toxinas. Tomar baños de vapor. Alimentarse sanamente. Rezar. Meditar. Ejercitarse todos los días (aunque sea pocopero es importantísimo). Alejarse de todo lo que intoxica el cuerpo. Reír mucho. Amar. El cáncer no tiene por qué ser una sentencia de muerte sino una oportunidad para atender nuestro cuerpo y nuestras emociones.